Don Omar experimenta metamorfosis musical con «King of Kings»
Ataviado con traje oscuro y con su cabello trenzado, el vocalista –que una vez más sostiene ser ‘El Rey del Reggaetón’– respondió a preguntas de PRIMERA HORA que «decir que la carrera de Don Omar se apagó, solamente lo puede decir alguien que cerró los ojos o que sólo está mirando un punto».
«Mucha gente puede decir lo que quiera. Creo que el mundo habla de reggaetón y de exponentes, y todos sabemos de quién se habla. Me he mantenido como el mejor exponente, haciendo mis cosas alrededor del mundo», expuso durante un almuerzo con la prensa.
El rapero, que promociona el primer sencillo «Angelito», de su disco «King of Kings», que saldrá a la venta el martes 23 de mayo, acotó que en la fecha del lanzamiento de su proyecto musical «todos van a reconocer quién es ‘El Rey del Reggaetón'».
Como parte de la actividad, se proyectó el vídeo de «Angelito» filmado en Roma, y cuya historia trata de una joven que, por rebeldía con su pareja, sale a beber con sus amigas y entre copas se entrega a un desconocido que la contagia con VIH.
El creador de «Dale, Don, dale», que ya ha sido criticado por el tema «Angelito», indicó que «lo que piense o diga la gente, bueno o malo de la canción, es lo que te mueve. La mayoría de los latinoamericanos padece HIV y quiero, con la canción, abrir conciencia».
«Hay que hacer un llamado para que la gente se cuide un poco más. Ninguna mujer tiene derecho de marcar la vida de un hombre, ni viceversa, contagiándola (con sida)», dijo.
Don Omar añadió que con su disco pretende proyectar la metamorfosis personal y musical por la que ha transitado. Por eso, quiere dirigirse «de la forma correcta, por mí, por mis fanáticos y por mis hijos. Quiero que se creen más líderes. Yo soy un líder con defectos».
Juan Vidal, presidente de VI Music, sello discográfico al que pertenece Don Omar; Gustavo López de Machete Music y Jesús López de Universal Music sorprendieron al rapero al entregarle una placa gigantesca con varios discos, y su imagen, por los dos millones de copias vendidas de sus producciones «The Last Don» y «The Last Don: Live».
Aunque recalca sin inhibiciones en sus canciones «Así soy» y «Bandoleros» que seguirá con «mis ojitos coloraos», William Omar Landrón, mejor conocido como Don Omar, asegura que «estar trabajando como los locos se ha convertido en mi adicción».
Reconoció, asimismo, que el 2004 y 2005 fueron años de mucha polémica en su vida, al punto que llegó a pensar que eso le impediría lograr la producción y composición de los temas que integran «King of Kings», por lo que «la gente pudiera pensar o decir de mí».
«Lo que tengo claro es que el disco cambió mi vida. Moverme de la Isla (hacia Nueva Jersey) me dio un poquito de touching, como dice uno. Tuve que crecer muchísimo a esta realidad de la vida, de que ya tengo 28 años, no soy un niño. Darle mucho más atención a lo que es la carrera. Me estoy cuidando más», precisó.
Refuerza su espíritu
Don Omar reconoció haberse sentido cohibido ante el mar de críticas que le arropó lo que a su vez le ha reforzado el espíritu guerrero para continuar con su agenda de trabajo, sin detenerse.
Ante tal situación asumió la actitud de que él no estaba mal, sin importarle lo que dijeran de él, «como que era un pedante o muy sentimental. Pero ahora, sí me importa todo, sin dejar de ser yo».
«No voy a dejar de ser Don Omar, ni el guerrero que soy en mi género. Hoy en día el género se ha expandido más y el representar la comunidad latinoamericana se ha convertido en una responsabilidad para todos nosotros, como exponentes de la juventud», reiteró.
Con seis años de trayectoria musical, Don Omar descubrió, luego de una conversación con su equipo de trabajo en Roma, la importancia de ser un hombre de compromiso.
«Me hablaban de lo importante que es ser un hombre de compromiso y ser un hombre de propósitos. Y en Roma entendí que no importa con quién tengas el compromiso en el mundo, sino tener el compromiso con uno mismo, de ser una mejor persona todos los días», puntualizó.