Su origen, por ejemplo, es el de esos jóvenes humildes que desde muy niños soñaron con ser cantantes, pero que tal vez nunca se imaginaron que harían parte del Grupo Niche.
Para el repitente, Mauricio Castillo, regresar a Niche es una nueva oportunidad de ratificar sus condiciones vocales en la más grande orquesta del país y la posibilidad de consolidar su imagen y prestigio.