Los ojos son filtran, enfocan y tamizan la luz en su paso desde el exterior hasta nuestras retinas. Ahí, las ondas de luz excitan una serie de células llamadas conos y bastones que recogen la información y la transmiten al cerebro.
Ese esfuerzo puede dar lugar a lo que se conoce como astenopia, o fatiga, del ojo. “La astenopia acomodativa es consecuencia del esfuerzo continuado del ojo para enfocar de manera nítida lo que tenemos delante” explica el doctor Javier Gómez, Oftalmólogo “es un proceso parecido al que ocurre cuando aparece la presbicia, conocida también como vista cansada, en adultos a partir de 40 años. La acomodación no funciona del todo bien”.
También es importante resaltar que cuando estamos mirando la pantalla hay unos rayos provocados por una serie de emisores (LEDs, por ejemplo), que irradian la luz hasta nuestros ojos. Eso provoca calor, y un calentamiento leve pero sensible en la superficie del ojo que puede acentuar los problemas con la sequedad del ojo.