(No te pierdas: 48 años de romance y desamor con el Sonero de la Juventud)
Cifuentes argumentó que esa celebración hace parte del patrimonio nacional y por ende el estado tiene la obligación de financiarlo, también aclara que no es por el hecho de que sea una fiesta religiosa o no, si no porque es una tradición para los habitantes de la capital del Cauca por más de cinco siglos.