Un estudio realizado en Estados Unidos, demostró que las personas que ganan menos dinero tienen a envejecer con mayor rapidez, tal parece que los ingresos económicos son más importantes de lo que pensábamos.
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El estudio utilizo a 100 mujeres afrodescendientes, y tuvo en cuenta factores que también pueden intervenir en el proceso de envejecimiento como nivel de educación, estado civil, traumas de infancia, entre otros.
Ya que el 68 % de las personas que tenían ingresos reducidos tendieron a envejecer con mayor rapidez, mientras que el 70 % de las mujeres que ganaban un sueldo cómodo, tenían un envejecimiento más lento.
Los científicos asocian este fenómeno con la tensión que genera la preocupación por los gastos y la inestabilidad económica.
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