Tras visitar al médico después de sufrir severos dolores de espalda y posteriormente al no sentir nada de la cintura hacia abajo, la preocupada adolescente hizo que con intensos estudios trataran de encontrar el diagnóstico por el cual quedó en silla de ruedas, poco después de haberse puesto este accesorio en su nariz.
“La paciente se realizó un procedimiento cutáneo que generó una infección que dio entrada a la bacteria en el torrente sanguíneo. Y no se había aquejado antes de un dolor en la espalda, así que lo más probable es que el problema lo haya causado la bacteria hallada en su sangre», expresó un cirujano que la atendió. Poco después se supo que al parecer por no controlar a tiempo dicha infección, esta bacteria viajó al torrente sanguíneo y le afectó esta parte de su cuerpo.
“Este procedimiento detuvo la progresión de la paraplejia, que podría haberse extendido más. La pus podría haber una generado una infección que la podría haber matado. Al extraer el líquido, la médula se descomprimió y el cuadro de la paciente mejoró”.
¡Muy fuerte!