Otro de los arrepentimientos más comunes es «ojalá no hubiera trabajado tanto», debido a que muchos sentían que no tenían un balance entre su trabajo y su vida personal, y además no habían podido disfrutar con sus seres queridos.
También es común que los pacientes no encuentren paz al no haber expresado sus sentimientos a quienes querían, o simplemente decir con sinceridad lo que sentían por ellas.
La enfermera confesó además que muchos se arrepienten de no haber visto a sus viejos amigos para recordar momentos de la vida, pero que nunca habían hecho el esfuerzo de visitarlos. Asimismo, sienten que pudieron luchar por ser más felices.