El perrito, que fue llamado Aquiles, tenía una lesión grave en la columna vertebral, no controlaba esfínteres, tenía sangrados anales y ya no respondía a ningún estímulo.
«Estaba en un estado muy lamentable, muy lastimado, no podía hacer uso de sus patas traseras,no podía caminar por un trauma medular que afecta de manera permanente la función nerviosa de todo el tren posterior del cuerpo», afirmó Valentina Guarín, miembro de la fundación.
En el municipio de Irra, municipio de Quinchía en #Risaralda, se están presentando casos de violencia sexual contra los animales, con Aquiles, el perro de la imagen, ya van dos casos confirmados por los animalistas. Infortunadamente Aquiles murió (Hilo) pic.twitter.com/RuN4LmsDpw
— RadioConexión Animal (@RCAnimal) November 3, 2020
El pasado mes de mayo, otra perrita llamada Alma fue rescatada, luego de que el trabajador de una mina abusara de ella, ocasionando secuelas de las que no se ha podido recuperar.
«Alma apareció dos semanas después en un estado de salud muy lamentable por lo que la hospitalizamos y a través de una radiografía pudimos ver que en medio del abuso sufrió una lesión en la zona del hueso pélvico que no le permite caminar», explicó Guarín.
Por el momento, las autoridades están en busca de los delincuentes que han cometido estos hechos aberrantes en contra de la integridad de los animales.