Aunque la mayoría ha recibido esos mensajes de forma positiva, una mujer se sintió ofendida con lo que le escribieron a ella.
En el vaso se leía: “Ana, eres muy bella”.
Al ver esto, la mujer le tomó foto y se quejó en redes sociales, asegurando que no había necesidad en que se refirieran a su físico.
“No entiendo la necesidad que el vendedor de café le dé por escrito a uno comentarios sobre su físico a las 7 am”, escribió.
Al ver su queja, la empresa le respondió: “Ana, nuestros baristas siempre escriben mensajes sinceros que no tienen ninguna otra intención que llegar al corazón de quien los lee, para hacer de su día uno mejor. Sentimos no haber llenado sus expectativas”.
Que alguien le diga que no le están echando la madre por favor!! pic.twitter.com/R9oUK84H4N
— angelica duran (@angelicaduranb) March 2, 2020
Se ofenden por un cumplido, hasta donde ha llegado el feminismo extremo.
— Daniela Sanchez (@DanhyWinchester) March 15, 2021
A mí tampoco me gustan esos mensajes, francamente innecesarios. En una relación proveedor-cliente esos mensajes están de más, no me interesa en lo absoluto la opinión de la persona que me atiende en un establecimiento comercial de ese tipo. Me interesa que me atienda bien. Punto.
— RoSaReal (@portilucho) March 3, 2020