Luego de un capítulo en el que las celebridades compitieran por su permanencia en el programa, Tatán Mejía no pudo contener las lágrimas al enterarse de que sería uno de los semifinalistas de esta temporada. Con la participación especial de cocineras de plazas de Bogotá, las celebridades tuvieron que organizarse en equipos para el reto, pero fue la actriz Cristina Campuzano quien eligió los capitanes para esta edición: Tatán Mejía, Ramiro Meneses y Carlos Báez.
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La competencia consistió en preparar una mesa completa, sopa, seco y postre para los tres chefs en tan solo 60 minutos, pero solo un equipo pudo quitarse el delantal negro al salvarse del reto de eliminación. Los equipos conformados por Carlos y Rosalba; Tatán con Nubia; Cristina y Estiwar G. junto a Liliana; y Ramiro, Chicho y Marta, se probaron ante el jurado quienes definieron que el peor plato había sido el de Carlos e Isabella.
El reto de salvación, que se dividió en dos etapas, envió en su primera fase a Carlos e Isabella a la ronda de eliminación. Mientras que Tatán, Cristina y Estiwar G, iniciaron una nueva preparación con tan solo media hora, para luchar por su permanencia en el programa. El reto consistió en utilizar uno de dos cortes de cerdo en una preparación que desafiara el paladar de los expertos.
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Mejía sorprendió a los chefs, Nicolás de Zubiría, Jorge Rausch y Christopher Carpentier, y recibió elogios por su plato que le mereció ganarse el cupo en la nueva etapa de la competencia. Las lágrimas no esperaron, pues el artista comentó que sentía nostalgia a la vez que alegría. “Ha valido la pena. Lo he buscado con muchas ganas de verdad”, afirmó. A la vez que expresó que se siente cansado, “esta moto va bajita de gasolina ya, hay que volverla a tanquear, creo que este descansito de ahora es extra puro”.
