La historia del parto de una mujer en Estados Unidos le ha dado la vuelta al mundo por el curioso lugar en el que alumbró a su bebé. Alandria Worthy se encontraba rumbo al hospital con su prometido, debido a las contracciones, cuando le pidió a su prometido que se detuviese en un McDonald’s para ir al baño.
Así lo reveló la mujer a un medio local, según People: “Entré al baño y mi fuente se rompió de inmediato”, y reveló que al poco tiempo sus gritos podían oírse en el restaurante. Por ello, la administradora del lugar se acercó para ver lo que estaba sucediendo y se topó con la mujer en pleno trabajo de parto.
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“Pensé que alguien estaba bromeando, abrí una puerta y no vi a nadie, pero vi uno pies”, explicó la administradora, Tunisia Woodward, y agregó que encontró a la madre acostada sobre el retrete mientras gritaba. “En ese momento supe que debía decirle a mi equipo que tendríamos un bebé”, puntualizó.
Así, la administradora del restaurante y tres trabajadoras se dieron a la tarea de ayudar a Alandria a tener a su bebé, con la asistencia de un operador del 911. En ese momento, ingresó el prometido de la mujer y al presenciar la escena no tardó en ponerse ‘manos a la obra’.
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El equipo del restaurante la ayudó
“Le decía que respirara, la ubiqué en el suelo y me quité la ropa. Las mujeres de McDonald’s estaban en frente de ella sosteniendo sus manos y sus pies estaban en mis rodillas”, explicó Deandre Phillips.
En medio de los gritos y las contracciones, el operador de la línea de emergencia les indició qué pasos seguir en el nacimiento de la pequeña. “Fue algo bueno que tuviésemos muchas personas en el lugar, pues no habría podido ayudar si hubiese estado manejando”, sostuvo el hombre.
La bebé nació luego de tres pujos y 15 minutos después de que su madre ingresara al restaurante. Sus padres y las trabajadoras de McDonald’s le dieron una calidad bienvenida y un apodo que no olvidará por el resto de su vida.
“Vamos a llamarla pequeño nugget. Ese es su apodo”, explicó la administradora del lugar, por lo que los demás decidieron conservarlo. “Es definitivamente un nugget. Okay, vamos a llamarla así”, explicó el padre.
