Justamente, para tal fin hay un objeto emblemático de la época, el árbol de navidad, el cual es infaltables en medio de estas celebraciones y que para muchas culturas simboliza la luz en medio de la oscuridad que trae consigo el invierno. Además, representa la vida y la esperanza.
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No obstante, muchas familias que ya se encuentran adelantando el armado de este representativo objeto se cercioran previamente de que éste esté limpio, teniendo en cuenta que dura gran parte del año permanece guardado llenandose de polvo en la mayoría de los casos.
Hay varios aspectos para tener en cuenta a la hora de limpiar este objeto decorativo. El primero es sacudir el polvo que en la mayoría de los casos alberga, por lo que se recomienda que antes de ubicarlo en el lugar en el que va a armarlo, lo sacuda de tal manera que pueda eliminar cualquier suciedad.
De igual forma, otro tip, si quiere ser más riguroso también puede ser colocar las ramas del árbol sobre el suelo y con mucho cuidado pasar una aspiradora por encima de cada una de ellas para que erradique cualquier tipo de suciedad que haya quedado allí.
Otra opción de limpieza que también se puede utilizar es humedeciendo el árbol con agua y de igual forma, con precaución ir de a poco restregando con un trapo suave cada una de las ramas y sus respectivas agujas, teniendo cuidad de no desprender ninguna. Posteriormente dejarlo secar en un lugar que pueda darle el sol y la ventilación necesaria para tal fin.
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Finalmente, hay un paso que es opcional y depende mucho del estado del árbol de navidad, pues en caso de que encuentre ramas dañadas, lo ideal es ir “podándola” con unas tijeras, con el fin de mejorar su aspecto. Esto le permitirá sin duda, que, a la hora de decorarlo, se concentre en las partes con mejor apariencia.