A diario, son múltiples los empleados que no solicitan los aumentos de salarios por temor a que su solicitud sea contraproducente o a que la respuesta sea negativa. Este sentimiento puede traer problemas en el ejercicio de sus labores, pues no existe la motivación suficiente para ejercer y los aumentos anuales no logran llegar al salario que se espera, o en muchas ocasiones la responsabilidad laboral se aumenta y el salario sigue siendo el mismo.
¿Le ha pasado? Si es así, le contamos algunas recomendaciones que pueden hacer más fácil ese momento y que le darán herramientas para hacerlo de manera estratégica.
Lo primero que debe saber es que tiene que mostrar confianza en sí mismo y saber lo que representa su aporte a la empresa; pues hay que dejar de esquivar las conversaciones sobre salarios y entender que es un ejercicio recíproco.
Se recomienda elegir el momento adecuado e informarle a su jefe para que se programe una reunión para hablar del sueldo, ya que esto permitirá la disposición de ambas partes y la probabilidad de llegar a un negocio.
Antes de hablar con su jefe, tenga una cifra exacta del valor que quiere recibir, pues es una de las preguntas que su jefe le hará. Es importante definir esta cifra estratégicamente, ya que es posible que entren en una negociación sobre esa base. Recuerde entregar una cifra que se ajuste al mercado laboral actual y a las labores contratadas.
Se aconseja tener varios argumentos para demostrarle a su jefe que es viable el aumento de salario o las nuevas condiciones que está solicitando. Se recomienda también no compararse con sus colegas, pues generará una barrera durante la conversación con su jefe.
Durante la reunión, mantenga una actitud positiva sobre la situación y entusiasmo por la solicitud, pues esto demostrará su disposición a negociar y a trabajar por la empresa.
Como en cualquier mensaje a transmitir en los entornos laborales, al manifestar esta petición se recomienda comunicarse asertivamente, con precisión, escuchando y siendo empático en todas las situaciones, lo que hará más amena y persuasiva la conversación.
Recuerde que, así como puede tener una respuesta positiva o negativa por parte de su empleador de inmediato, lo más seguro es que este tenga que pensarlo y manifestar la situación a otras áreas de la compañía, por lo que resulta importante entender y esperar pacientemente la respuesta.
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