La historia se había vuelto tendencia en el país por los contenidos que los pasajeros compartían con ella en sus redes sociales.
De acuerdo con él, la rescató de una casa en el municipio de Itagüí, en la que no le prestaban la atención adecuada, pues tenía varias enfermedades y hasta la tenían durmiendo encima de sus propias necesidades.
Sin dudarlo, don Rodrigo la acogió y la volvió en su compañera fiel. Aunque ella no le ladraba ni lo podía ver, se aferraba a cada palabra y caricia de su amo que la consentía desde el puesto de copiloto del taxi.
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“La perrita fue intervenida… eso prácticamente, en la veterinaria nos dijeron que ya se moría”, dijo don Rodrigo en entrevista con Noticias Caracol.
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«La llevé hasta el veterinario, la estabilizaron, le colocaron medicamentos y yo me puse a hablarle al oído y a decirle que yo estaba con ella, le dije cuanto la amaba, pero de un momento para otro descargó su cabecita y a los pocos minutos se quedó quietica, grité: se me murió la niña «, contó, muy triste.
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Finalmente, Don Rodrigo despidió con un conmovedor mensaje a ‘su niña’, como la llamaba.
«Quería pasar el resto de mi vida contigo, pero me honra profundamente saber que pasaste el resto de tu vida conmigo y que seremos amigos por siempre”, expresó.