Una vez más la vanidad y los malos procedimientos cobran una nueva vida en el país. Esta vez la víctima fue una joven que viajó desde España con la ilusión de mejorar su apariencia, pero terminó encontrando la muerte.
Según se conoció, una joven de apenas 23 años identificada como Laura Sofía Amaya murió luego de someterse a una cirugía estética en Bogotá.
La mujer acudió a un supuesto centro estético ubicado en la localidad Antonio Nariño, al sur de Bogotá, para realizarse una lipoescultura, lugar que conoció por recomendaciones de otras personas.
Según reveló un familiar de la víctima a Noticias Caracol, al inicio no confiaba en el lugar, pero la supuesta cirujana y otras personas que ya habían sido operadas allí hicieron que confiara y terminó decidiendose por este para su procedimiento.
Sin embargo, al llegar al lugar descubrieron que no era una clínica, sino un local como cualquier otro, pese a esto, Laura Sofía decidió hacerse su cirugía.
“Nosotras dimos con ella porque muchas conocidas se habían operado con Brenda Gissel Celeita Angarita. Los resultados al inicio eran geniales, ellos se hacían notar mucho por redes sociales. Ella se nos presentó a nosotros como médica esteticista profesional, entonces nosotras confiamos. Eso no era una clínica, era un local”, dijo la mujer.
Los hechos se registraron el pasado 15 de septiembre, cuando Laura Sofía acudió al lugar a realizarse el procedimiento estético. Según denunció la familiar de la joven, al parecer, la víctima se habría caído de la camilla en medio de la cirugía.
De acuerdo con la información, al salir de la cirugía la joven presentó varios problemas de salud, por lo que tuvo que ser llevada de urgencias a un centro médico, donde finalmente murió.
¿Quién era la víctima?
Según se conoció, Laura Sofía Amaya era una joven colombiana y madre de un niño de 4 años.
Ana Sofía que se había radicado en España en busca de un mejor mejor futuro para ella y su hijo, pero había regresado al país para cumplir su sueño de operarse y de paso llevarse consigo al menor al país europeo donde se encontraba trabajando.
Ahora, su muerte enluta a toda una familia, quienes nunca se imaginaron que en su visita a Colombia encontraría la muerte.
Tras la denuncia de la muerte de la mujer, el centro estético cerró todas sus redes sociales y la supuesta cirujana que la operó está desaparecida. Por el momento la Fiscalía está adelantando las investigaciones pertinentes, mientras que la Secretaría de Salud de Bogotá verifica si el lugar cumplía o no con todos los requisitos para operar y realizar dichos procedimientos médicos.
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