Por ello, es normal verlos en los parques oliéndose el trasero los unos a los otros, pero no es por gusto, sino es su modo de saludarse, conocer el sexo, la edad, si están en celo o por el contrario si están pasando por momentos de depresión, estrés o ansiedad.
Si bien es una de sus formas de comunicación, los ‘peluditos’ tienen esta conducta porque con sus más de 200 millones de receptivos olfativos, alcanzan a percibir las glándulas apocrinas sudoríparas, es decir, las que se encuentran en la ingle, cuero cabelludo y axilas. Adicional, olfatear estas zonas para ellos es bastante enriquecedor por toda la información que pueden recopilar.
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Asimismo, está mostrando un fuerte interés por ti y de alguna manera, expertos creen que es un gesto de cariño.
Por otra parte, debido a su olfato tan desarrollado, tanto los perros entrenados en rescate, detección de sustancias, entre otros y los que no, al parecer, tendrían la habilidad de saber si una mujer está menstruando, lactando, ovulando o si recientemente tuvo relaciones sexuales.
Si para ti se convierte en una situación molesta el constante olfateo de partes íntimas por parte de tu perro, te recomendamos no regañarlo o reprenderlo violentamente, pues además de reprimir sus impulsos naturales, podrías desatar todo tipo de malas conductas como orinarse dentro de la casa o que le empiece a ladrar descontroladamente a cualquier persona.
Por lo tanto, lo mejor que puedes hacer es distraerlo con su juguete favorito, enseñarle con paciencia a respetar el espacio personal de los demás o en caso de que suceda en el parque, pasearlo con correa para que no olfatee las partes de otras personas.
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Además de conocer el sexo, edad, si una persona recién tuvo relaciones íntimas, entre otros, la ciencia en compañía de los veterinarios, evalúan la posibilidad de que los perros detecten el cáncer.
De acuerdo con el estudio ‘The Nose Knows: olfateando el cáncer en el Penn Vet Working Dog Center’ de la Universidad de Pensilvania, publicado en 2016, tres razas distintas de canes: Pastor alemán, Labrador retriever y Springer spaniel, fueron entrenados para hallar muestras de sangre con cáncer de ovario maligno, esto con el fin de «ayudar a crear un sistema de detección temprana del cáncer que algún día podría salvar vidas», explican dentro del informe.