La presentadora Paola García vivió un calvario por pasarse de botox; casi se queda ciega
La comunicadora debió renunciar a su trabajo y someterse a varios meses de tratamiento por pasarse de ‘retoquitos’ en su rostro.
Recientemente se hizo tendencia el caso de Ninel Conde, quien apareció en redes con una apariencia muy diferente a la de sus años como Alma Rey, en la novela Rebelde.
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Una de las figuras públicas que reveló haber atravesado un verdadero calvario por cuenta de pasarse con los tratamientos estéticos fue la presentadora Paola García, recordada por su paso por el programa Nexo de ESPN. García reveló al programa ‘Lo Sé Todo’ que su vida corrió peligro por exceso de botox.
Una decisión que le pasó factura
“A veces ese poquito de más nos puede costar muy caro. Ya me había puesto mi dosis y la doctora dice bueno quedó este poquito, ¿quién se quiere aplicar? y yo aplícame un poquito acá (pómulos) y un poquito acá (frente). Literalmente fue un poquito”, explicó.
Pasados unos días después de la intervención, García empezó a presentar síntomas como enrojecimiento en su cara e hinchazón en las zonas donde se lo aplicaron. Por tal, asistió a varios especialistas que no lograron dar con la causa de su padecimiento.
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Sin embargo, consiguió que la atendiera una especialista que identificó que su diagnóstico era “muy grave”. Por ello, la presentadora recordó que debió renunciar a su trabajo pues no podía maquillarse ni someterse a jornadas de grabación que pudieran afectar su piel.
En ese momento se preguntó de qué viviría, sin embargo, se enfocó en el tratamiento. “Yo duré encerrada en mi casa, no podía salir, maquillarme, sino tener mucha tranquilidad y tomé una decisión. Mi decisión fue nunca más volverme a mirar al espejo, para no juzgarme tan duro”, explicó.
¿Qué le pasó?
La presentadora debió someterse a una biopsia para dar con el origen de su problema, gracias a ello descubrieron que tenía una bacteria que podía causar repercusiones en su visión. “Parece que tienes una bacteria que se te puede ir por los ojos. El tema iba más de lo estético, pasaron unos 4 meses llorando y desesperada porque pensé que en un momento se me iba a abrir la cara”, agregó.
Afortunadamente, García explicó que la hinchazón de su rostro desapareció y le agradeció a Dios por
“devolverle la cara”. La presentadora reveló que, a pesar de su padecimiento, su rostro no quedó con secuelas.
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