Este 15 de agosto, la Policía de ese país realizó una rueda de prensa en la que señaló que la investigación sobre este caso concluyó. Afirmaron que hay suficientes pruebas para acusar a Daniel Sancho de asesinato premeditado.
«Hemos consultado al fiscal sobre algunas de las pruebas y son suficientemente consistentes para acusarle de asesinato premeditado, lo que conlleva la pena de muerte” dijo Surachate, subdirector de la Policía de Tailandia.
Las autoridades explicaron que el fiscal asignado será quien estudie el caso y establezca la petición de pena de cara al juicio.
«Si fue premeditado y era algo que se había preparado de antemano, suele ser pena de muerte. Sin embargo, todo depende del tribunal», agregó el funcionario.
Según contaron las autoridades de ese país, Daniel Sancho apuñaló a Edwin Arrieta en el lado izquierdo de su pecho, en medio de una discusión.
«Hubo una pelea y entonces Daniel apuñaló a Edwin, quien se golpeó la cabeza contra el lavabo«, señaló Surachate. Luego de esto, presentaron una fotografía en la que se observaba una camiseta rajada, donde no se podían ver a simple vista rastros de sangre.
Se conoció que algunas de las pruebas encontradas en el lugar del crimen fueron dos cuchillos y una sierra.
Surachate especificó que el desmembramiento del cuerpo se prolongó durante tres horas. Después, Sancho se quedó toda la noche limpiando los rastros en el lugar del crimen, un hotel reservado por el español junto a la playa de Salad, en la isla de Phangan.
Según las autoridades, el crimen ocurrió, según la confesión de Sancho, porque el joven quería terminar la relación que tenía con Arrieta y este último no estaba de acuerdo.
Cabe recordar que al inicio de la investigación de este crimen, Daniel Sancho señaló que él se sentía en una jaula con
«Soy culpable, pero yo era el rehén de Edwin. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero era una jaula. Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, aseguró Sancho durante una conversación en la comisaría de policía de Koh Phangan, donde se encontraba detenido.