Los casos de intolerancia, riñas y agresiones verbales en la vía pública parecen ser el ‘pan de cada día’ en diferentes regiones del país, así lo han manifestado un gran número de usuarios en redes sociales quienes han mostrado su preocupación por la violencia y el papel de las autoridades en su prevención.
Recientemente salió a la luz el video de una acalorada discusión entre dos masajistas en las playas del sector de Marbella, en Cartagena, pues se fueron a los puños por ganarse un cliente que se encontraba en la zona. En el video se ve a una de las protagonistas sentada sobre la otra mientras le jalaba el cabello y le propinaba golpes en el rostro.
Ante la mirada de los ciudadanos
En un punto de la escena, la mujer que sujetaba a la otra se levantó y se dirigió a otro sitio de la playa, pero la riña continuó. No contenta con haber sido agredida, la mujer que estaba tendida en el suelo persiguió a su contrincante y la amenazó con golpearla.
“Parte la botella, pártela”, se escucha decir a un testigo de la escena. Sin embargo, un sujeto salió al rescate de una de las implicadas y se dispuso a atacar a una de las mujeres. Esto causó rechazo por parte de alguien presente en la escena quien le gritó y le pidió que no continuara: “aquí, no”.
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En medio de la disputa, una de las protagonistas retó a la otra al decirle: “¿qué me vas a hacer?”, cuando escuchó que usaría una botella para herirla. El video de la riña finalizó con un fuerte comentario del sujeto que intervino: “voy a acabarte”.
Hasta el momento se desconoce la identidad de los implicados y si las autoridades tomaron medidas en el caso. Los internautas manifestaron su rechazo por la intolerancia e indicaron que no sería la primera vez que esto sucede.
Intolerancia en las calles
Este no es el primer caso de discusiones que terminan a los golpes, hace unas semanas se conoció el video de un agente de tránsito que se fue a los puños con el conductor de una motocicleta en medio de un retén en el Valle del Cauca.
En el video, compartido en Twitter, se logra ver el momento en que la discusión entre los hombres escaló hasta las agresiones físicas. El uniformado le habría impedido llevarse su vehículo, por lo que el conductor le dio un puño en la cara.
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En un fragmento de la grabación se logra ver que el agente tenía el rostro ensangrentado y que a pesar de que uno de sus colegas los distanció, no se contuvo y continuó con la pelea.
