Al margen de todas las expresiones culturales, la comida cobra gran protagonismo en estas celebraciones y sobre todo las recetas que salen a relucir en esta época como los son los buñuelos y la natilla.
Mira también: El regalo de Navidad que Andrea Valdiri dio a sus empleados: «No puede faltar en el hogar»
Y es que, ¿a quién no le gustan los buñuelos? La gente puede comerlos sin parar y hasta perder la cuenta debido a su exquisitez y sabor. Estos están preparados con masa de harina de trigo en forma de esfera y contienen queso costeño, azúcar y huevos.
Estos ingredientes se amasan para convertirlos en una bola que va a un recipiente de aceite caliente para que inicie su cocción, sin embargo, cuando las esferas tocan el líquido hirviendo comienzan a dar vueltas. Algunas personas se preguntan por qué sucede esto y la ciencia tiene la explicación.
Vale la pena mencionar que muchas veces los buñuelos también suelen quedarse pegados entre sí y hasta tomar formas extrañas a la esférica, por lo que muchas personas evitan a toda costa su preparación. En todo caso, esta deliciosa receta contiene dicho misterio que fue resuelto por un profesor universitario.
Cuando se encuentra el punto de equilibrio o gravedad en el centro del buñuelo y se sumerge en el aceite, inmediatamente este se altera y sube, por lo que empieza a girar solo.
De igual manera, si el punto de gravedad se encuentra a un costado del buñuelo, este va a girar a donde se concentre el peso de la masa.
Te puede interesar: ¿De sacerdote a «Grinch»? Así le dicen a Alberto Linero por sus comentarios sobre navidad
Por otro lado, el docente también explicó que el aceite ejerce una fuerza contra los buñuelos llamada empuje, lo que permite que estos floten. La parte de la masa que está en contacto con el aceite pierde el agua más rápido y el centro de gravedad se va desplazando al punto más húmedo o pesado de la masa.
MÁS SOBRE: