“Una guerrera”: mamá de Egan Bernal dio detalles de su lucha contra el cáncer de seno
Flor Marina Gómez publicó un emotivo mensaje de agradecimiento por el apoyo, luego de terminar sus sesiones de radioterapia.
“Cuando se tiene cáncer se aprende a ver la vida de otra manera y te das cuenta que tienes muchas cosas por las que salir adelante. Te das cuenta que la enfermedad y los síntomas del tratamiento no son más fuertes que tu voluntad de salir adelante”, escribió Gómez en una publicación sobre su batalla.
Lucha contra el cáncer
Flor Marina ha aprovechado sus redes sociales para ser voz de aliento, pero también de concientización sobre la importancia de asistir a los controles para detectar esta enfermedad. Luego de varios meses de tratamiento de quimioterapia, mastectomía, Gómez se ha mantenido positiva sobre su proceso.
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Con un video de su última sesión de radioterapia, la madre del ciclista compartió un emotivo mensaje sobre su recuperación.
“Hoy terminé mis radioterapias, solo agradecimiento con Dios y todos por sus oraciones y mensajes de motivación, hoy puedo dar mi testimonio que el cáncer de mama si se detecta a tiempo tiene cura. Aunque falta mucho aún, un tratamiento muy largo. Un par de cirugías de reconstrucción, los controles y cuidados habituales”, escribió.
Los seguidores de la historia de Flor Marina no tardaron en compartir sus mensajes de apoyo y admiración por su resiliencia.
“Lo celebramos”; “Fuerza, señora bonita”; “Toda una leona, usted es embajadora de todas las mujeres que están pasando por eso y ayuda a motivarlas a seguir en la lucha”; “Eres una dura”; “Eres inspiración mi Flori, una guerrera”; “Gran ejemplo de fortaleza, valentía y amor”, escribieron en la publicación.
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Su testimonio como madre
Flor Marina Gómez ha demostrado la cercanía que tiene con sus hijos, Egan y Ronald Bernal, así como su apoyo en la carrera deportiva de los jóvenes. Por motivo del aniversario del accidente de Egan, por el que debió ser intervenido y trasladado a UCI debido a la gravedad de sus lesiones, Gómez reveló que fue uno de los momentos más duros de su vida.
“Un año del terrible accidente. 365 días agradeciendo a Dios por permitir que mi hijito volviera de nuevo a nacer. Alguien me preguntaba que mi cáncer es lo más difícil que me ha pasado en la vida. Le dije que no”, escribió.
“Nada se compara con el dolor de una madre al sentir que puede perder a su hijo. Hoy es solo agradecimiento a Dios y a todas las personas que estuvieron ahí para salvarle la vida”, puntualizó.
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