El 8 de octubre del año anterior se conoció un indignante caso de discriminación y clasismo en el barrio Villa María de Villavicencio.
Una mujer acosó y agredió a un par de mujeres que tenían su puesto de arepas sobre la vía. Incluso, les lanzó excrementos de su mascota luego de que las mujeres fueran indiferentes ante sus insultos y exigencias de retirarse del sitio.
Hagámosla famosa. Esta mujer botó el excremento de sus mascotas al rededor de un puesto de comidas en el barrio Villa María de Villavicencio con el fin de aburrir a quienes trabajan allí, porque según ella, están en un sector exclusivo de la ciudad. pic.twitter.com/6rNjkFrqZa
“Grosera, respete. Porque usted tiene plata y yo no pero nos hace la misma persona. Que usted viva en este estrato no quiere decir nada”, le decían a la mujer que además se mojaba y bailaba delante de ellas para ofender a las trabajadoras aun más.
Lina María Quintero, la principal afectada de esta situación dijo en su momento al periodista local Steven Liévano: “Yo estoy trabajando aquí honradamente, lo digo públicamente. Yo estoy pagando mi universidad, porque mi hijo cumpla sus sueños y para sacar a mi mamá adelante. No me da pena. La humildad viene del corazón”.
Sin embargo, pasó todo lo contrario y antes se agudizó más la situación de violencia. Lina María fue raptada por unos hombres y fue abusada sexualmente.
Quintero relató esos angustiosos momentos que vivió y la alcaldía ofreció una recompensa por sus agresores.
Los hechos sobre el episodio de violencia sexual contra una mujer se están investigando por autoridades competentes
Ofrecemos recompensa de 10 millones de pesos para dar captura al responsable.
La familia ha pedido la mayor discreción. Pedimos respeto absoluto.
Noticias Uno dio a conocer hace unos días que luego de ser abusada, Lina María recibió amenazas constantemente a su celular. Un sujeto que se identificó como el comandante del grupo “Héroes del llano” le dio un ultimátum a la joven estudiante y emprendedora. Aseguró que si en 12 horas no abandonaba la ciudad iban a atentar contra ella. “Están pagando para matarla, no matamos mujeres”, reveló el medio citado.
Lina María se habría ido de ilegal con su hijo para los Estados Unidos y actualmente se encuentra en San José, California. En medio de lágrimas, Quintero reveló que está sobreviviendo en Norteamérica de la misma manera que lo hacía en Colombia, vendiendo arepas y empanadas.
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