Dentro de las principales razones por las que algunas personas están tomando la decisión de cambiar su vehículo de gasolina a gas natural están: altos precios del combustible líquido, rendimiento y autonomía del mismo. Sin embargo, existen otras variables que pueden influir en dicha decisión.
Según el portal Carro Ya, todo vehículo con motor de combustión interna puede ser modificado para que funciones con base en gas natural vehicular, incluyendo los motores que funcionan con diésel. El gas natural, según indica, podría generarle ahorro entre 40 y hasta 55% de combustible, además, reduce ostensiblemente las emisiones de partículas contaminantes.
De acuerdo con Vanti, empresa que presta el servicio de conversión a gas natural vehicular, hay dos tipos de tecnologías para llevar a cabo la instalación: el convencional que aplica para vehículos con motores alimentados por carburador y el sistema de inyección, que aplica para para vehículos con motores alimentados por inyección electrónica.
Son cuatro pasos los que se debe seguir con Vanti para la instalación de gas natural: recepción y diagnóstico, aprobación de incentivos económicos o plan de financiación, instalación del sistema y certificación y entrega del vehículo.
Existen muchas empresas que realizan este procedimiento, no obstante, los precios pueden variar. En el caso de Vanti, este proceso de conversión ronda los 2.4 a 3.5 millones de pesos dependiendo la capacidad y los cilindros a instalar.