El pasado 26 de noviembre se llevó a cabo en la Plenaria de la Cámara de Representantes el último debate del proyecto de ley que buscaba aprobar el ‘Divorcio Exprés’, el cual tiene como objetivo “facilitar el proceso de divorcio al permitir que la decisión unilateral de uno de los cónyuges sea suficiente para disolver el vínculo matrimonial”. De cuerdo con el legislativo, el divorcio exprés elimina la necesidad de que ambas partes estén de acuerdo a la hora de una separación o que se presenten algunas causas específicas. El proyecto que pasó a conciliación y luego a sanción presidencial promueve la autonomía de las personas y busca reducir los conflictos derivados de los procesos que, entre otras cosas, suelen ser demorados y desgastantes.
Una de las autoras de la iniciativa es la representante del partido Alianza Verde, Katherine Miranda, quien explicó en Noticias Caracol todo lo relacionado con este proyecto que tras ser sancionado se convertirá en ley de la República. Y es que el panorama en materia de divorcios es complejo. Según cifras reveladas por la congresista, en 2022 se dieron 36.424 y en 2023 31.783 divorcios en el país. Después del ‘Divorcio Exprés’, que faculta a una persona para separarse únicamente con su consentimiento, estas cifras podrían aumentar ostensiblemente.
De acuerdo con esta iniciativa, lo que se incluye en las causalidades para finalizar una sociedad conyugal es la manifestación de voluntad de cualquiera de los cónyuges. Ahora bien, se propende que el divorcio ya no sea un motivo de disputa, sino que el proceso se centre en estos factores.
Vale la pena mencionar que esta ley no modifica ninguna de las causales para el divorcio contempladas anteriormente, sino lo que hace es facultar a los cónyuges para que puedan adelantar un proceso de manera unilateral y voluntaria. NO infiere en temas como repartición de vienes o custodia de los hijos. Otros cambios que incluye esta iniciativa contempla algunos beneficios para quienes han sufrido algún tipo de maltrato al interior del hogar. Básicamente, contempla lo siguiente.
De acuerdo con el sitio web de ‘Banal Abogados’, instaurar un proceso de divorcio vía Notaría conlleva unos gastos que oscilan entre los 200 y 400 mil pesos. También se puede hacer a través de un juzgado donde no hay que cubrir un pago, excepto por los honorarios del abogado.
Además, explica Banal Abogados que, si hay bienes, se deben adicionar a los derechos notariales y el 4×1000 de los activos menos los pasivos. En caso de que haya hijos en la sociedad conyugal, “se deberá adicionar entre $300.000 y $500.000 pesos, dependiendo de la tarifa notarial y del número de hijos”.
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