Sábados Felices se convirtió en la cuna del humor colombiano, por su set han pasado decenas de humoristas que hoy en día son recordados con gran admiración en el país como Polilla, la Gordita Fabiola, el Hombre Caiman, Hugo Patiño, Cesar Corredor, Fatman, entre otros. Tras más de 50 años el programa sigue siendo parte del Canal Caracol reuniendo a decenas de familias todos los fines de semana
Sin duda, entre este listado de los más recordados también se encuentra Hugo Neimer Gonzáles, más conocido en el mundo del espectáculo como ‘Lucumí’, nacido en La Toma, un municipio de Suárez, Cauca, un apasionado de humor, la actuación e incluso la radio donde también se ha desempeñado.
Lucumí fue secuestrado por un grupo armado
Por estos días el comediante ha dado de que hablar por cuenta de una antigua entrevista en el programa ‘Se dice de Mí, donde habló de detalles poco conocidos de su vida y recordó el angustiante momento que pasó cuando fue secuestrado por un grupo armado.
Y es que Lucumí vivía en el corregimiento de La Toma, ubicado en Suarez, Cauca, un territorio apoderado por la v10lenc14 de las FARC. Según detalló durante la entrevista todo ocurrió cuando estaba en el colegio, tras asistir a una fiesta lo subieron en una camioneta en la madrugada y lo llevaron al otro lado del río Cauca.
El hermano del humorista aseguró que el temor de su familia fue tan grande que pensaron que su hermano estaba sin vida.
“Yo prácticamente estuve en el campamento. Me decían ‘ahora cuando amanezca lo matamos’. Yo como que tengo un ángel, porque ahí mismo apareció una de las guerrilleras y dijo usted no es, lo han confundido. Lo voy a ayudar”, comentó.
No obstante, una de las mujeres pertenecientes al grupo criminal aseguró que se trataba de una confusión y decidió ayudarlo, tomaron una canoa y le pidió que no se apareciera nunca más
«Cuando él llegó a las 6, 7 de la mañana venía sucio y me dijo es que me tenían secuestrado»,agregó su hermana.
El miedo y la incertidumbre no terminaron allí, pues al haber estado en un territorio prohibido, Lucumí debía salir de su casa. Despidiéndose con gran dolor de su familia, se tuvo que ir para Tuluá junto a sus hermanos mayores en busca de un mejor futuro.
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