Este caso ha despertado profunda conmoción entre los habitantes del municipio cundinamarqués, quienes llevaron a cabo una velatón en el parque principal el pasado 24 de agosto para pedir justicia en este caso. De acuerdo con testimonios de vecinos de Esperanza a Revista Semana, Esperanza fue víctima de violencia intrafamiliar durante varios meses, sin embargo, el día del ataque todo parece indicar que el agresor se encontraba ebrio y escuchando música con alto volumen.
Cansados de esta situación, los vecinos se alarmaron porque posteriormente escucharon gritos, por lo que decidieron llamar a las autoridades quienes acudieron al lugar de inmediato. Las versiones indican que el sujeto discutió con Esperanza y con el mismo licor que estaba consumiendo se lo arrojó por el cuerpo y posteriormente le prendió fuego. La mujer fue trasladada de urgencias al Hospital San Rafael de Facatativá y posteriormente remitida a Bogotá, donde fue recluida en la Unidad de Quemados del Hospital Simón Bolívar.
Allí fue intervenida quirúrgicamente en varias oportunidades y le hicieron injertos de piel. Sin embargo, en los últimos días habría adquirido una bacteria que acabó con su vida. Yenny Esperanza era madre de familia y dejó a una menor de catorce años. Desde la alcaldía de Subachoque lamentaron su partida y le pidieron a la justicia actuar cuanto antes para identificar al responsable de sus heridas.
“Hemos declarado tres días de luto para acompañarla en este último adiós. Una mujer valiente y con la mejor capacidad de servicio dado que prestaba una importante atención a los contribuyentes en la Secretaría de Hacienda. Le solicitamos a las autoridades que agilicen, es momento que se esclarezca para conocer qué ocurrió allí”, comentó Jorge Camacho, alcalde de Subachoque.
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