Por eso, existen diversas disposiciones de los elementos que se pueden transportar en la cabina de una aeronave y también de los que nefariamente deben ir en el equipaje facturado o de bodega. Es necesario que los usuarios verifiquen todas las condiciones y restricciones de las aerolíneas para poder abordar y también es responsabilidad de las empresas proporcionar información clara y precisa acerca de lo que se puede y no se puede transportar en los diferentes equipajes.
Para nadie es un secreto que los dispositivos electrónicos hacen parte de la cotidianidad de las personas y de casi todos los viajeros. Sin embargo, hay ciertos artículos que solo pueden transportarse en determinadas condiciones o simplemente quedar completamente prohibidos.
De acuerdo con la Agencia de la Unión Europea para la Seguridad Aérea (EASA). Por sus siglas en inglés, las baterías portátiles recargables que funcionan con iones de litio “pueden incendiarse si sufren daños, cortocircuitos o un sobrecalentamiento. Por eso debe llevar sus dispositivos electrónicos portátiles (cámaras, ordenadores portátiles y teléfonos) en el equipaje de mano (a bordo) y no en el equipaje facturado”.
Asimismo, estas baterías o cargadores portátiles deben estar protegidos de forma individual para evitar un cortocircuito y en la mayoría de los casos su transporte está sujeto a su capacidad en WH. Normalmente, las aerolíneas permiten que por persona pueda llevar 2 en el equipaje de mano.
Finalmente, la EASA indican que estas baterías no deben recargarse a bordo del avión y recomiendan que, en dado caso de que el viajero requiera que sus dispositivos vayan en el equipaje de bodega o facturado, debe asegurarse que estén completamente apagados y que no se puedan activar de forma accidental.
MÁS SOBRE: