Para la iglesia católica este es un tiempo para dedicar a la reflexión y oración, por lo que previo a esta los devotos tienen unos días de preparación de la Pascua, así como lo hizo Jesús en el desierto antes de ser crucificado.
Existen varios mitos y creencias sobre lo que los fieles pueden o no hacer durante su celebración, entre los que se encuentran el no uso del color rojo, el no consumo de carnes rojas y pollo y hasta no bañarse.
Sin embargo, uno de los mitos la más comunes tiene que ver con tener relaciones sexuales, pues para algunos feligreses tener sexo durante la también denominada Semana Mayor es considerado pecado.
Según la creencia popular, si una pareja comete estos actos en medio de estos días podría sufrir graves consecuencias y ser castigado por Dios.
Una de las supuestas consecuencias es que las parejas que tengan relaciones sexuales podrían quedarse pegados en medio del acto, especialmente si se hace el Viernes Santo.
¿Qué tan cierta es esta creencia?
Con el paso de los años sigue existiendo la duda de si se puede o no tener sexo durante la Semana Santa.
Aunque esta es una de las creencias más comunes, lo cierto es que la Iglesia no tiene escrito, ni en la Biblia, conceptos del Vaticano u otro documento, alguna doctrina que prohíba el tener relaciones sexuales durante la Semana Santa.
Por lo anterior se podría decir que dicha “abstinencia sexual” está más ligada con un aspecto cultural, pues para quienes celebran la Semana Mayor guardan una especie de luto por la pasión y sufrimiento de Jesús en sus últimos días sobre la tierra, por lo que deciden evitar ciertos placeres por medio de la abstinencia y el ayuno, principalmente el viernes y sábado santo.
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