Sin embargo, las grandes figuras del género han tenido que batallar incluso con la situación de violencia del país, como el caso de Arelys Henao, quien fue desplazada de su tierra natal. Asimismo, cantantes como Jeison Jiménez que trabajó desde muy niño en una plaza de mercado para sobrevivir y al mismo tiempo fue cosechando con sus letras la carrera que hoy en día ostenta.
Un caso similar ocurrió en la vida de Jhonny Rivera, quien dejó su pueblo natal en Risaralda para trabajar en Bogotá como domiciliario y carpintero. Sin embargo, una profunda depresión a causa de una ruptura amorosa y la falta de dinero hizo que volviera la casa de su madre con muchas frustraciones y deudas.
A su regreso se dedicó a vender mesas en la calle. Su vida a los 30 años con un hijo fue bastante compleja y debido a esto lloraba de forma inconsolable. Fue en el momento de desespero máximo que en una cantina donde estaba tomando una cerveza interpretó una canción del Charrito Negro que estaba sonando. Los mismos clientes lo elogiaron y él empezó a creerse los buenos comentarios que la hacían.
Posteriormente, el dueño del establecimiento también se percató de su talento para cantar y le dio un micrófono para que cantara una canción. No defraudó y allí su fama en el pueblo fue aumentando. Fue tal la emoción que causó dentro de los asistentes a una discoteca que el dueño le propuso contratarlo para deleitar al público.
Desde allí su iniciativa por el canto se hico mayor y duraba horas practicando música popular y romántica frente al espejo, sin dejar de trabajar en la venta de mesas. En diálogo con Dímelo King, Rivera contó cuánto le pagaron por su primera presentación en aquella discoteca.
“El dueño de la discoteca, todo borracho me dijo: ¿cuánto me cobras para venir a cantar? – Le dije yo: si me da 50 mil pesitos, vengo. Me dijo, le voy a dar 30. Yo le dije: al menos 35 porque yo nunca he cantado y tengo que botar los nervios y aprenderme las canciones (…) Yo mismo hice carteleras y yo mismo me hice publicidad. Ese día fue una locura y la pegué con la música de los años 60. Hace 20 años era decir 120 mil pesos ahora”, dijo Rivera al creador de contenido.
Finalmente, Jhonny comentó que un hombre que estaba entre el público lo mandó a buscar a los 8 días para contratarlo. Él pedía 140 mil pesos por su presentación y terminaron pagándole 500 mil pesos por su show. “Me dieron 500 mil pesos y eso fue una fortuna para mí pasar de 35 a 500, eso sí fue plata, de hecho, tenía miedo que me atracaran”, agregó.
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